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domingo, 20 de febrero de 2011

¿Qué pasa con las casas?

 
Cuando estudiaba secundaria alguien me explicó que la lucha entre las clases sociales era el motor que hacía girar las ruedas de la historia. De esta forma, la lucha entre los trabajadores y los poderosos (o como se resuelvan estas) determina el futuro. Muchas personas dicen que la lucha de clases ya no existe (que es cosa de otros tiempos) Dicen que de lo que se trata ahora es de arrimar entre todos el hombro para salir adelante. Pero esa es una mentira de los poderosos para ganarnos. Y nos están ganando, yo le he visto varias veces.


Sin ir más lejos, el otro día al salir de clase iba a pasar a ver a mi amigo y ahora también blogero David Fajardo y vi en la calle tres patrullas de la Policía Nacional. Los agentes hablaban con una mujer a través de la puerta que seguía cerrada. Cuando volví, al poco tiempo, la policía seguía allí. La mujer lloraba y decía -¿A dónde vamos a ir?. Un hombre llenaba un coche de objetos cotidianos como ropa, mantas, libros... 

Estaba contemplando un desahucio. Claramente, esta lucha (la de tener una vivienda digna, Derecho Humano que no está conquistado en este país) no la están ganando los trabajadores. Los poderosos (si quieres saber más sobre ellos, visita "culpables de la crisis") están consiguiendo su objetivo: ganar dinero, y con la ayuda del gobierno (el cual pone a disposición de sus intereses a los cuerpos policiales y legisla la conocida ley de "Desahucio Exprés") .

Volví a pasar días después por la misma calle. El resultado de la lucha fue una casa con una puerta  tapiada y una familia en la calle. Si la rueda de la historia avanza en vez de retroceder, algún día los trabajadores conquistarán el poder político del Estado (lo que supondría sustituir la actual dictadura de los poderosos por la dictadura de los trabajadores, también conocida como democracia). Y la policía no irá a sacar a familias de sus casas para que un banco las cierre a cal y canto, irán a buscar al banquero, al especulador y al explotador culpable de tanta injusticia y precariedad.

2 comentarios:

  1. Nadie debería ser echado de su casa sólo porque un especulador bancario, que lo único que le importa es llenarse los bolsillos de fajos de billetes, se le haya antojado a seguir ganando dinero. La vivienda es tan necesaria como el comer.

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  2. Triste y cierto. Y yo cruzo los dedos para que estano sea la tónica de los próximos años. ¿De dónde la gente puede obtener dinero si nos quitan los medios para conseguirlo? Son irracionales con la instrumentación del ciudadano a la hora de acatar unas exigencias económicas.
    Y mientras tanto, cada pequeño sector privado se enriquece a su manera, sin pensar en que la situación concreta dicta unas directrices que la normativa que ellos tienen estipulada no se puede sostener.
    En el caso de las hipotecas, la realidad hace 6 o 7 años era diferente a la que hay ahora ¿Cómo pueden mantener unos pagos con el cambio económico-laboral existente, que no beneficia para nada al trabajador?

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