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lunes, 19 de abril de 2010

Todo atado y bien atado




El conocido juez Baltasar Garzón ha sido sentado en el banquillo. Va a ser juzgado por intentar investigar delitos contra la humanidad, como el genocidio que se dio durente el franquismo, sistema del que es heredero el actual régimen monárquico.

Los mecanismos de represión de los que se dota el Estado no pueden permitir que se investiguen los fusilamientos, se anulen los juicios sumarisimos, que se destapen las fosas comunes ni que se juzgen a los colaboradores del franquismo, algunos de ellos senadores o jueces actualmente.

La sociedad levanta timidamente la voz para denunciar esta situación, y se nos acusa de ir contra lo que ellos llaman "la democracia" por ejercer el derecho a expresar opiniones de forma pública.

Franco lo dejo atado y bien atado. Sus herederos aprietan el nudo.

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